PRESENTACION
LA EMPRESA
Me llamo Rafael Torralba Morillas y tanto mis colaboradores como yo constituimos una empresa con una dilatada experiencia en la construcción de todo tipo de estructuras de madera, fruto de nuestra colaboración con las principales empresas del sector.
Estamos fuertemente comprometidos con el medio ambiente y sensibilizados con el bienestar del ser humano.
Entendemos que somos una alternativa a este mundo en que la ética de muchas de las empresas de este sector se decanta más bien hacia el beneficio rápido, primando el destajo y descuidando la calidad.
Es por ello que hemos desarrollado como señas de identidad cualidades como responsabilidad, trato personalizado con nuestros clientes, honradez y compromiso.
Ofrecemos la disponibilidad de desplazarnos a cualquier punto geográfico para dirigir y realizar directamente vuestros proyectos.
Nuestras casas de madera cumplen con los criterios de calidad y respeto al medio ambiente, pues proceden de bosques gestionados de tal manera que esta materia prima se convierte en una fuente renovable de forma ilimitada.
Nuestras construcciones van desde las casetas de jardín hasta viviendas de cualquier tamaño y varias alturas.
Antes que nada, demos un recorrido por el mundo de las casas de madera.
QUÉ DEBERÍAMOS SABER SOBRE LAS VIVIENDAS DE MADERA
Vivir en una casa de madera es beneficioso para la salud y una inversión de futuro que proporciona bienestar y armonía en nosotros y con nuestro entorno.
Este bienestar está corroborado por las muchas familias que ya viven en estas casas. Ellos son el testimonio y nuestro mejor aval de confianza.
A pesar de todo esto, hay algunas dudas que le surgen a la persona al que le atrae experimentar esta calidad de vida y no ha tenido la oportunidad de obtener información fiable. Ahora pasamos a poder aclarar algunas cuestiones.
CONFORT Y AHORRO ENERGÉTICO
La madera es un aislante natural y por sus propiedades, también es un excelente regulador de la humedad ambiental. Por eso notaremos, siempre que estén bien construidas, que en invierno son cálidas y en verano frescas.
Dicho de otra manera, no hace falta instalar aparatos y sistemas de climatización demasiado potentes, por lo que ahorraremos en costes de instalación y facturas de consumo.
Está más que contrastado que el ahorro llega a más del 40 %.
También están bastante documentados los efectos beneficiosos que sobre nuestra salud ejerce vivir en una casa de madera.
MANTENIMIENTO
Algunas personas creen que la madera es un material delicado cuando se le somete a los rigores de la intemperie.
En cierto modo es verdad cuando la madera no es de buena calidad y no se le ha tratado adecuadamente.
Sin embargo, la experiencia de las casas construidas durante siglos en los países con tradición en viviendas de madera, demuestra que esto no es así, pues encontramos casas con varios cientos de años cuya madera sigue gozando de muy buena salud.
Esto se debe a que la madera utilizada procede, como nuestras casas, de las zonas más próximas al círculo polar, cuyas propiedades las consiguen por la incidencia de la luz y climatología.
Es decir, al tener poca luz crecen muy lentamente y los troncos tienen una densidad muy alta haciéndolos menos vulnerables a las agresiones externas.
Esto, junto a una política de explotación responsable, hacen de esta materia prima un excelente material.
Una vez construida la casa, se la somete a un tratamiento con lasures de calidad, tanto exterior como interiormente.
Esto es muy importante, puesto que utilizar los productos adecuados hace que
nuestra casa esté bien protegida y saludable.
Los productos utilizados siempre son de poro abierto para permitir que la madera, por así decirlo, respire.
Primero, le damos un fondo que ya nos deja la madera inmunizada contra insectos y hongos. Este fondo ya pigmentado, hace que actúe como filtro ultravioleta.
Después se le da el barniz de acabado, también de poro abierto, que le proporciona el aspecto y protección idóneos.
Estos productos también son al agua, librándonos de emanaciones no deseables y respetando el medio ambiente.
Una vez hecho esto, sólo debemos preocuparnos de darles de vez en cuando tratamiento, sobre todo exterior, que por otro lado, no es muy costoso.
Por lo demás, como cualquier casa.
Este tiempo es variable en función de varios factores:
Incidencia de la radiación solar por la ubicación y orientación de la casa.
Zona geográfica (costa, montaña, etc.)
El clima de la zona.
La meteorología, pues de un año a otro cambia a veces.
LA SEGURIDAD
Otra de las preocupaciones a la hora de optar por una vivienda de madera es el tema de la seguridad, pues al ser de madera, que es un material combustible, surge la duda sobre qué comportamiento tendrá la casa en caso de percances en que esté involucrado el fuego.
Para la tranquilidad de los que están considerando adquirir una casa de madera, les diremos que tanto nuestras casas de tronco macizo como de entramado ligero (Frame), cumplen sobradamente la normativa en cuanto a protección se refiere.
Pondremos un ejemplo sencillo para conocer el comportamiento que tienen las casas de tronco macizo en caso de incendio.
Todos nosotros hemos participado más o menos alguna vez en alguna barbacoa de leña.
Pues bien, ya podemos estar con el mechero encendido una semana debajo de un tronco más grueso, que no lo encenderemos a no ser que pongamos trocitos más pequeños, con el objeto de hacer un fuego potente que permita prender el tronco más grande.
Los incendios en las casas nunca empiezan por la estructura, sino que primero se prenden cortinas, alfombras, mobiliario pequeño, etc. que es lo que provoca un fuego grande que acaba por afectar la estructura.
Pues bien, cuando tenemos un fuego ya de estas características, es igual que sea de madera o de otro material, con la particularidad de que la madera no es buen conductor térmico.
Así podemos aislar el fuego en una habitación, dándonos más tiempo de reacción.
Esto es así porque no contienen como en el hormigón, las varillas metálicas que al calentarse dilatan, resquebrajan y derrumban estructuras.
De esta manera se ataja el fuego con algo más de tiempo.
En cuanto a las casas de entramado ligero, los tipos de aislantes y diferentes partes de la estructura están tratados con materias ignífugas retardando los efectos del fuego.
Pero como he dicho antes, cuando hay un incendio muy grande de los elementos contenidos en la casa, pasa como cualquier otra casa sea del material que sea, pero es bueno tener en consideración los tiempos que tenemos para atajar cualquier eventualidad que en el caso de las casas construidas con nuestros criterios se prolongan dando más tiempo de reacción.
También es de sobra conocido que las casas de madera resisten mucho mejor los movimientos que pueda haber por asentamientos de terreno o terremotos, debido a su relativa flexibilidad, haciéndolas más seguras si usted vive en una zona de riesgo sísmico.
De todas formas hay que señalar que ante las fuerzas de la naturaleza hay pocas cosas que el ser humano pueda hacer, pero es de resaltar que construcciones como algunas pagodas orientales, situadas en zonas que han sufrido terremotos, siguen en pie, estando construidas de madera.
Para los promotores y entidades colaboradoras con programas de reconstrucción en países que han sufrido desastres naturales o conflictos armados y destructivos, les diremos que las construcciones de madera son una excelente solución por su bajo coste y rapidez en la construcción, tanto provisional como definitiva.
COSTES
Ante la disparidad de precios que hay en el mercado quisiéramos hacer algunas reflexiones que quizás nos ayuden a entender que es lo que estamos adquiriendo y qué queremos para nosotros y nuestra familia.
¿Queremos una vivienda o una cabaña auxiliar?
¿Es de buena calidad la madera?
¿De donde procede la madera?
Grosor de los troncos
¿Es laminada?
¿Cumple con la ley de edificación de su país?
Técnicamente, ¿están bien diseñadas?
¿Tienen montadores cualificados con conocimientos y formación?
Los materiales utilizados, como aislamientos, ¿están bien calculados?
¿Ofrecen garantías de que se cumple lo pactado?
Las ventanas y puertas, ¿Son de buena calidad y cumplen normativas?
¿Utilizan lasures respetuosos con el medio ambiente y de calidad?
A todo esto podemos decir que garantizamos que todas estas cuestiones las podemos responder satisfactoriamente.
Una vez aclaradas estas especificaciones, ahora pasamos a detallar los gastos que se derivan a la hora de construir una vivienda.
Hay que tener en cuenta que cualquier construcción que se destine a vivienda ha de cumplir con la ley de edificación y llevar sus correspondientes permisos municipales, estudio geotécnico de la parcela y proyecto realizado por el arquitecto/a.
Previamente hay que recoger las normativas municipales que definen márgenes entre vecinos, alturas máximas, pendientes de tejado y materiales permitidos o no.
Estos datos son variables de un ayuntamiento a otro, así como las taxas.
Para construcciones auxiliares o casetas de jardín hay que consultar en cada ayuntamiento la normativa vigente.
Una vez averiguado estas cosas, hay que encargar el presupuesto del proyecto ejecutado por un arquitecto/a y los costes de la cimentación.
En este apartado hay que tener en cuenta el terreno donde se piensa edificar, pues dependiendo del tipo de base (tierra, piedra, arenisca, etc) y de los desniveles propios del terreno, el presupuesto puede variar sensiblemente.
Una vez que tenemos estos costes en mano, el cálculo de la vivienda se definirá teniendo en cuenta el diseño de la vivienda (m2, distribución, nº de niveles de piso, etc.).
Proporcionándonos estos datos, con mucho gusto le confeccionamos un presupuesto ajustado en breve tiempo.
